Los cobijos indígenas una simbiosis de la naturaleza

Los cobijos indígenas una simbiosis de la naturaleza 

Se sabia principalmente por referencias bibliográficas, que las sencillas edificaciones vernáculas tenían unas condiciones muy adecuadas de adaptación climática, pero no se conocen estudios científicos que ofrezcan resultados reales sobre las cualidades del aire interior y la vida en estas viviendas.

Las construcciones primigenias acumulan un conocimiento detallado y preciso de sus materiales y cualidades arquitectónicas en términos de respuesta climática y de sus detalles constructivos, producto del conocimiento transmitido de generación en generación durante siglos y que permiten generar soluciones claras y directas a los problemas tanto formales como constructivos y climático. (Rodríguez, N., 1993)

Las construcciones primigenias conocidas también como vernácula, aborigen o indígena son respuestas que surgen de la principal necesidad, la protección ante la intemperie y las inclemencias del medio ambiente que les rodea, para lograrlo estas comunidades se apoyaron en el empleo de materiales de construcción vegetales provenientes del medio natural inmediato. Estos ejemplos podemos verlos actualmente en Venezuela, variadas edificaciones tradicionales indígenas de distintas etnias como indica Gasparini, G. y Margolies, L. en su libro "Arquitectura Indígena en Venezuela" uno de los mas importantes trabajos realizados en esta materia. Es de notar la preocupación de los autores por dar un correcto nombre a lo que actualmente conocemos como “Arquitectura Indígena” resaltando que no es correcto el empleo de nombres como “Arquitectura primitiva o popular” pues las construcciones denotan interesantes soluciones y evolucionadas técnicas constructivas que quedan fuera del marco de lo rústico, primitivo o poco elaborado. Los investigadores definieron como eje fundamental de la arquitectura indígena la íntima relación con el medio ambiente, prácticamente una simbiosis, dando como resultado una arquitectura completamente desviada de los sistemas ampliamente conocidos como, rural y urbano.

A lo largo de la historia, la relación entre clima y arquitectura ha sido siempre íntima, estableciéndose una dependencia de los materiales, las técnicas, los sistemas constructivos y el diseño de los edificios con el clima del lugar. La arquitectura vernácula representa la adecuación perfecta entre el clima, las necesidades humanas y la construcción sostenible y por ello se podría decir que es la primigenia arquitectura bioclimática. (Neila J., 2003).

El estudio de los cobijos indígenas es de especial interés en el campo investigativo bioclimático por ser ejemplo en cuanto a las temperaturas de bienestar del espacio interior en relación al exterior. Las viviendas cuentan con técnicas de enfriamiento pasivo que fueron desarrolladas a lo largo del tiempo y que ha quedado como herencia a los habitantes indígenas del siglo XXI. Estas formas de enfriamiento merecen la pena ser estudiadas y posteriormente porque no hacer una analogía del sistema indígena que pueda ser aplicado efectivamente a nuestro sistema constructivo actual.